Y pasar mi vida entera, enganchado a su melena...
Entradas
Mostrando entradas de diciembre, 2010
Sea.
- Obtener enlace
- X
- Correo electrónico
- Otras aplicaciones
A veces pienso que todos se han ido a algún lugar lejos de Bahía Azul y que yo me he quedado atrapado en el tiempo, esperando en vano que la marea púrpura de septiembre me devuelva algo más que recuerdos. No me hagas mucho caso. El mar tiene estas cosas; todo lo devuelve después de un tiempo, especialmente los recuerdos.
Cada instante es un sueño.
- Obtener enlace
- X
- Correo electrónico
- Otras aplicaciones
El Palacio de la Medianoche
- Obtener enlace
- X
- Correo electrónico
- Otras aplicaciones
El valor del joven le había granjeado unos minutos preciosos que no podía desperdiciar bajo ninguna circunstancian, ni siquiera para lamentar la memoria de su hija. La experiencia ya le había enseñado que el futuro le reservaría más tiempo del tolerable para lamentarse de los errores cometidos en el pasado .
Blond girl.
- Obtener enlace
- X
- Correo electrónico
- Otras aplicaciones
Incliné la puerta, dejando apenas dos dedos de apertura, haciendo que un pequeño rayo de luz y polvo se colase en mi estancia oscura. Respiré varias veces y me armé de valor. Entré. Los finos rayos de sol se filtraban entre las cortinas, dándole a la pequeña habitación un aspecto mágico, triste, olvidado. Una capa de polvo y recuerdos cubría muebles y juguetes olvidados tantos años atrás. Me acerqué, despacio, con la sensación de que si me movía un poco más rápido de lo debido todo aquello desaparecería, yo despertaría y mi sueño se borraría. Pasé el dedo índice por encima de una foto, dejando el rastro y descubriendo unos ojos azules como el cielo, como mi cielo. El corazón se me aceleró y las manos comenzaron a sudarme. Un golpe seguido de un susto. Miré sobresaltado hacia la puerta. Y allí estaba. Allí estaba ella. Con su pelo del color del heno. Con su sonrisa. Con sus manos de porcelana. Con su sonrisa. Con sus ojos. Sus ojos. De un azul tan intenso que te podrías perder en ellos ...
Sabineando.
- Obtener enlace
- X
- Correo electrónico
- Otras aplicaciones
Les presento a mi abuelo bastardo, a mi esposa soltera, al padrino que me apadrinó en la legión extranjera, a mi hermano gemelo, patrón de la merca ambulante, a mi tío el marino que tuvo un sobrino cantante. Al putón de mi prima Carlota y a su perro salchicha, a mi chupa de cota de maya contra la desdicha. Mariposas que cazan en sueños los niños con granos cuando sueñan que abrazan a Venus de Milo sin manos. Me libré de los tontos por ciento, del trento del bisnes, dando clases en una academia de cantos de cisne. Heredé una botella de Ron de un clochar moribundo. Yo quería escribir la canción más hermosa del mundo.
Marina.
- Obtener enlace
- X
- Correo electrónico
- Otras aplicaciones
Alguien me contó que la vida nos concede a cada uno de nosotros unos escasos momentos de pura felicidad. A veces son solo días o semanas. A veces, años. Todo depende de nuestra fortuna. El recuerdo de esos momentos nos acompaña para siempre y se transforma en un país de la memoria al que tratamos de regresar durante el resto de nuestra vida sin conseguirlo.
God.
- Obtener enlace
- X
- Correo electrónico
- Otras aplicaciones
A Dios le gusta observar, es un bromista: dota al hombre de instintos, nos da esta extraordinaria virtud, y ¿qué hace luego? Los utiliza para pasárselo en grande, para reírse de nosotros, para ver como quebrantamos las reglas. Él dispone las reglas y el tablero y es un auténtico tramposo: “ mira , pero no toques ”; “ toca , pero no pruebes ”; “ prueba , pero no saborees ”. Y mientras nos lleva como marionetas de un lado a otro, ¿qué hace él? Se descojona, ¡ se parte el culo de risa !