Tanto tienes tanto vales, es la enseñanza primera.


Para ser gente de bien, ser un alguien importante, lo primero es estudiar y lo segundo es olvidarte de las cosas que tu corazón te mande. Que aunque te hagan feliz no sirven pa' comer. Y si tienes suerte ya veremos lo que pasa, quizas llegue a opositar, tal vez consiga una plaza, un buen puesto en oficinas del estado. Y olvidaré las tonterías que soñé.

¡Qué no! ¡Qué no!

 Que no es verdad que no haya tiempo para cerrar los ojos y poder volar por otros cielos. Afortunadamente sé que no es verdad que hayamos muerto abandonados a la cruda realidad de no querernos.

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