El laberinto de los espíritus - Carlos Ruíz Zafón

Tomó el libro y regresó al primer párrafo. A medida que pasaba páginas la inquietud que se había apoderado de ella se fue deshaciendo poco a poco. Al rato Alicia perdió la noción del tiempo. Ni siquiera Leandro podía seguirla y encontrarla en el bosque de palabras que aquel libro siempre abría ante sus ojos. Alicia sonrió y regresó a la novela sintiendo que volvía a casa. Hubiera podido quedarse allí todo el día. O toda la vida.

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